40
DÍAS EN EL VAUPÉS
1950
PARTE
20
• SALIDA PARA BOGOTÁ. 22 noviembre. En el
mismo Catalina de “Aída” y con el mismo piloto, ese sí gentil y bondadoso. Pero
era preciso pernoctar en Bávaro, centro cauchero de la mayor importancia en la
comarca. El avión no pudo aterrizar ahora, pero acuatizó en Mitú, por lo cual
fuimos en lancha hasta el enorme anfibio que nos devolvería a tierra abierta.
Una hora no más y acuatizamos en Carurú, en el alto Vaupés. El 23 noviembre.
Subimos al avión que amaneció tiritando en estas aguas del alto Vaupés. Dos
horas más y llegamos a San José del Guaviare. Todos los vecinos salen a
recibirnos y a rogarnos, casi con lágrimas en los ojos que les demos padres
misioneros. Que ya le tienen casita y que le harán de comer y lo cuidarán mucho
con pescado, con plátanos, maíz, queso y leche. El avión no daba espera y sin
desayunar salimos para Bogotá. Otra vez vamos sobre los eternos llanos,
cubiertos en partes por copos de nubes abundantes, remedo de las sábanas
blancas que se iban quedando al sur. El avión, en un derroche de esfuerzos,
elevó a 15,000 pies y atravesó esa altura la desafiante cumbre, mostrándonos
allá lejos estaba Bogotá con sus ríos sinuosos, amarillo y en parte salido de
madre. Descendimos al fin, a eso del mediodía en el campo de la FAC, aeródromo
militar (el CATAM de Techo). A la una de la tarde nos recibieron y almorzamos
amablemente con los padres eudistas, en el santuario de las angustias.
AERÓDROMO
DE TECHO
• VISITA AL PRESIDENTE. Por la tarde
visité al Presidente, Doctor Laureano Gómez. Le conté mis impresiones sobre el
Vaupés, interesándolo por esa lejana y abandonada porción de la patria. Visito
el ministro de gobierno quien al estilo del gran Laureano, me recibe con gran
amabilidad y me promete hacer todo lo que esté de su parte en pro del Vaupés.
La mayor dificultad del misionero consiste en que en la comisaría del Vaupés se
hablan 26 dialectos y los indios no saben el castellano, con rarísimas
excepciones. En Mitú, por ejemplo, no hay iglesia. La comisaría nos presta un
salón de la policía y allí se está celebrando las funciones del culto con las
incomodidades que son de suponer. Los misioneros necesitan tres motores de esos
que llaman de fuera de borda, para las excursiones misioneras y tres carros
jeeps.
LAUREANO
GOMEZ
• DONACIÓN. El gobierno nos de $150,000.
Ya los misioneros han abierto la trocha para iniciar la carretera de Mitú a
Montfort por nuestra propia cuenta. En fin, también hacen falta medicinas. No
hay más médico que los padres y las hermanas. Pero no tienen con qué curar y
aliviar las dolencias de estos pobrecitos indios enfermos.
Perdone
el lector estas lamentaciones, este gemir y llorar, este sempiterno
"pedir" de quienes tenemos sólo dos amores: Dios y la patria.
Glorificar a Dios salvarle las almas, defender y hacer grandes papás ya amadas
reduciendo y civilizando sus indios.
• SALIDA PARA MEDELLÍN. Muy temprano en
el aeródromo de Techo. Vuelo feliz hasta Medellín, donde aterrizamos a las 9:30
de la mañana. Mi carrito anda apresuradamente por la carretera que lleva a las
cumbres de Santa Rosa de Osos, en donde consagraré mañana la santa iglesia
catedral.
SANTA
ROSA DE OSOS 2013
FIN
DE LA CRÓNICA
Santa
Rosa de Osos. Noviembre de 1950
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