PARTE 20
EL MOTIVO: TOMAR NOTA Y SER
LITERATO. LA PARTIDA.
• Es que hasta los superiores había llegado la voz de que
"Uno de Tropa" tomaba nota de todo y pensaba contar en el interior
las bellaquerías que se sucedían en aquella guarnición. Para que no lo hiciera
sin duda, urdieron aquella trama inmunda. Así, después de ocho meses de
permanencia del Putumayo, en vez de evacuarlo como hacían con todos sus
compañeros, lo internaron más en la vorágine.
• No lo fusilaban pero lo enviaban a "El Encanto".
Mas logró salir vivo y hoy dice muchas de aquellas canalladas. Aunque se
guarda, por ahora, las grandes para tener las pruebas antes de publicarlas.
Éste es un anticipo de todo lo que luego sucedió. De tal manera que no lograron
burlar las intenciones de "Uno de Tropa" para evidenciar la forma
como se trataba.
• 25 Soldados y 10 Cabos Segundos llegaron a Puerto Leguízamo.
Jóvenes imberbes, casi todos con caras de niños, estaban henchidos con el
patriotismo de los recién llegados, que no conocen el sufrimiento diario y que
se creen héroes en embrión. Los Soldados y Cabos fueron destinados al bajo
Putumayo y como él, debían partir en la primera embarcación que ese dirigiera a
estos lugares.
• Llegó la lancha Calibio y se hicieron todos los preparativos
del viaje. "Uno de Tropa", entregó sus prendas. No le dejaron sino el
vestido que tenía puesto. Cuando fue a buscar el fusil para entregarlo,
predominó un exceso de rebeldía. Lo cargó con seis cartuchos y tomó la
resolución de no embarcarse sino de morir matando contra aquellos que eran sus
compatriotas, que lo trataban peor que un enemigo. El Cabo Carlos se percató de
sus intenciones y lo disuadió.
HERBERT BOY CON SU AVION
• A la mañana siguiente entró a una tienda y allí estaba el
Mayor Agudelo Gil quien le dijo, irónicamente, porque sabía la suerte que le
aguardaba: "Que le vaya bien". El suboficial no contestó. Se cuadró
militarmente y salió pensando: "Algún día te irá mal conmigo,
canalla".
• Partió hacia El Encanto. Además iban en la lancha el
Teniente Fonseca, quien actuó en el combate Güepí. Al cabo de media jornada
pasaron frente Peneya, guarnición peruana de más de 200 hombres. Después
"Yabuyanos”, otra guarnición peruana. Allí en Yabuyanos fue el sorpresivo
ataque de los peruanos a las cañoneras colombianos a principios de la guerra.
Era de noche cuando pasaban por ahí nuestros cañoneros, fueron sorprendidos por
una descarga de artillería y fusilería. Los nuestros contestaron inmediatamente
y los barcos, por orden de sus jefes, se dirigieron velozmente la orilla. Al
desembarcar los colombianos sólo encontraron el cuerpo exánime de un Sargento
peruano, acribillado a tiros. Los demás huyeron.
PARTE 21
EL VIAJE Y EL COMBATE DE
GUEPI
• Después "Puerto Arturo", la formidable y temida
posición que no eran sino dos ranchos de pajas, tapados por la maleza que los
peruanos dejan crecer exprofeso.
• Luego puestos colombianos como: "Peñas Blancas" y Calderón",
célebre por otro sorpresivo ataque en el año 33. Allí está el colono Calderón,
quien da su nombre al lugar. Muchos dudan si es un traidor, pero no lo es.
Lleva 30 años en aquella selva, en continuo trato con los peruanos, ya que
hasta el conflicto, Colombia tuvo aquello abandonado. Y en la selva se pierde
la noción de patria.
ACTUAL GUEPI EN EL LADO PERUANO
• Los soldados colombianos estaban en revista de uñas cuando
los peruanos abrieron fuego desde la orilla opuesta. El Mayor Gil ayudado por
el padre Castillo organizó la defensa y el enemigo huyó. Primero que el
enemigo, huyó el capitán colombiano Galindo. "Uno de Tropa" recordó a
Galindo cuando llegó a Bogotá convertido en una aureola de héroe y agasajado.
Llegaba con un delator balazo en una nalga, pero lo recibían con honores de
triunfador. En Esparta los guerreros heridos en la espalda se deshonraban.
