AERONAUTAS Y CRONISTAS

martes, 26 de febrero de 2019

1 OCHO LECCIONES DE LIDERAZGO MILITAR



Ocho lecciones de liderazgo militar
Para emprendedores
Robert T. Kiyosaki

(Las Notas son personales)

Nota: "Este es un resumen del libro de las ideas centrales del famoso conferencista reduciendo el texto a un 30% del original. No se pretende ignorar los muchos aspectos que ilustran los temas y que recomendamos leer en su totalidad. Porque son agradables y útiles para evidenciar y tener claridad.

El objetivo es hacer un facilitador de consulta y recordatorio. En especial para introducir con rapidez y puntualidad a los cadetes y alumnos de las academias militares que aspiran a la vida castrense. Es una herramienta en la comprensión y el aprendizaje del intelecto de la profesión. Centros de formación y capacitación donde se exige asimilar con rapidez la carga académica, en cantidad y calidad.
Pero que también son aplicables a los estudiantes universitarios que buscan ser directivos empresariales"

Prefacio.

La experiencia es una maestra cruel: Primero te hace el examen y luego te enseña la lección.

Los líderes relevantes ponen a todos los demás en primer lugar y ellos se ponen de último. Los líderes productivos se preparan individual y colectivamente, para obtener los mejores resultados posibles.

La vida no es un concurso de popularidad. Sal al mundo y haz lo que tengas que hacer.

Los líderes del mañana deberán tener visión, adaptabilidad y agallas para tener éxito en un mundo digital, lleno de humanos análogos. No obstante, hay un elemento esencial que jamás cambiará: Guiar con el ejemplo.

Quienes se rinden jamás logran nada. Y que la educación constante es fundamental para tener éxito.

Nota: el escalafón del conocimiento es comparable a de la ignorancia:
No saber que no sabe.
Sabe que no sabe.
Sabe que no sabe y no admitirlo.
Sabe que no sabe y no querer aprender.
Sabe que no sabe y creer que sabe.
No saber y dejar de aprender

Introducción.

Entrenamiento para la vida.

Me encantaba la escuela de vuelo militar porque nos inspiraban a enfrentar nuestros miedos todos los días. Yo no me inscribí en la escuela de vuelo para recibir un cheque constante o una jubilación temprana.

Nota: "Yo sí, porque la necesidad material eran lo más apremiante y nos limitaba la imposibilidad de la realización de nuestro objetivo fundamental. Porque nuestro fin era el deseo altruista de superación y satisfacción, espiritual e intelectual, adquiriendo el conocimiento del Ingeniero Aeronáutico. Lo que era  económicamente inalcanzable por mi familia. Por eso ese alto y largo escalafón que tuvimos que dar durante casi treinta años de vida militar,  fue solo el paso intermedio para lograr el objetivo. Que no sólo sirvió para llegar a la meta sino que aportó, en el camino, tantos otros elementos de valor adicional. Que al final nos dio el nivel de la satisfacción del éxito logrado y que fue muchas veces superior a lo esperado. Que, inicialmente, parecía casi que inalcanzable. Por eso ahora miramos con suficiente agrado la completa realización del esfuerzo. Donde el valor espiritual está por encima del valor económico y material, sin ser rico. Que no era la meta".

Yo estaba en la escuela de vuelo de la Marina porque quería recibir inspiración. Nuestros instructores nos forzaron a practicar maniobras de emergencia en lugar de enseñarnos a tener esperanza y rezar para que las cosas salieran bien.

Simulaban apagadas de motores para forzarnos a confrontar nuestro miedo, a mantenernos tranquilos y volando.

Mucha gente permite que sus emociones controlen su vida. En lugar de enfrentar sus miedos, se esconden de ellos.

Estados Unidos está muriendo debido a la creciente mentalidad del derecho los subsidios. Los hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas tienen un espíritu increíblemente fuerte, que le permitirá a nuestro país llevarnos de vuelta al capitalismo.

Nota: "Es bueno si es capitalismo social y humanitario.
Erradamente el capitalismo lucha para derrotar al comunismo, como en Viet Nam, cuando lo que debe hacer es luchar por engrandecer el capitalismo. El errado enfoque de luchar afuera, contra una ideología extranjera, no destruyó la ideología de los EE UU pero sí sufrió una catastrófica derrota militar externa. No acabó su riqueza económica pero depreció mucho su capital moral, ideológico y cultural.

El comunismo y el capitalismo no son malos, ni uno es mejor que el otro. Los malos son sus excesos. Aunque la historia humana demuestra que el extremismo se ha dado menos en el capitalismo que en el comunismo. Y de esa forma el error capitalista ha sido el menos malo. Que sin ser lo idealmente apetecido, si ha sido lo menos malo tolerable. Y humanamente lograble. Porque los excesos capitalistas han sido más soportables que los excesos comunistas.

Y los reprochables defectos de ambos no se han dado porque  pertenezcan a la esencia de esas ideologías sino que han provenido de los líderes que los han ejecutado. Son desatinos humanos, no de las ideas. Son errores en el cómo y no en el qué".

Capítulo uno.

Misión crucial. La necesidad de que haya empresarios.

Los hombres y mujeres que pertenecieron a las Fuerzas Armadas ya pasaron por un proceso educativo único y riguroso, esencial para todos los empresarios.

Nueve de cada diez negocios nuevos fracasan en los primeros cinco años. Entre esos sobrevivientes nueve de cada diez fracasa en los cinco años siguientes. La razón principal del fracaso es la falta de entrenamiento en la fortaleza para soportar el la carrera de ser empresario.

Otra razón por la que la mayoría de los empresarios fracasan, es que nuestro sistema educativo nos entrena para ser empleados, no empresarios. Nota: Subalternos no comandantes. Los empresarios deben ser suficientemente duros para operar sin un cheque de nómina. En el mundo de los pequeños negocios los empresarios ganan menos que sus empleados.
Nota: en cuanto tiempo y en cuanto a carga laboral mental intelectual, ese salario es aún menor. El peso espiritual es mayor que el muscular.

Y sufren también la versión empresarial del trastorno  de estrés postraumático (Nota: típico en la posguerra). El miedo a la falta de dinero constante es lo que obliga a mucha gente cubrirse con la seguridad que, supuestamente, ofrece el ser empleado. En mi opinión no se trata de falta de capital sino de la educación empresarial.

Los empresarios exitosos siempre afirman que están descapitalizados y por lo tanto no pueden sostener el crecimiento de sus negocios. Pero los verdaderos empresarios siempre se mantienen avanzando y algún día recibirán dinero a carretadas, pero les tomará bastante tiempo.

Me resulta gracioso escuchar “fulanito tuvo suerte”.
Creo que los hombres y las mujeres de las Fuerzas Armadas fueron entrenados para hacer lo imposible. La mayoría de los graduados universitarios sólo recibió entrenamiento necesario para encontrar empleo y ya.

Mi carrera militar empezó en la Academia de la Marina Mercante de los Estados Unidos. Aunque su escuela militar está bajo la dirección del Departamento de Comercio y no de El Defensa.
Después fui aceptado en la Escuela de Vuelo de la Armada de los Estados Unidos en Pensacola, Florida. Volé para la Infantería de Marina. Estoy completamente seguro que sin ese entrenamiento no habría tenido éxito empresarial. Nota: En mi caso: empezó en la Escuela Militar de Aviación de la Fuerza Aérea, que están integradas. Y en ella misma aprendimos a volar. Nos enseñaron las dos cosas: la vida militar básica y la capacidad primaria de volar. Después nos perfeccionaron la destreza gerencial o administración, como la denominan las universidades civiles (que en el campo militar se llama: Subordinación, mando y liderazgo)

¿Qué es hacer la trampa?

En las escuelas tradicionales nos entrenan para hacer los exámenes de manera individual y si colaboras estás haciendo trampa. En las escuelas de vuelo militares nos entrenan para cooperar y por lo tanto muchos exámenes los hacemos en equipo. Nota: los exámenes son la clase final de perfeccionamiento y el último ejerció de verificación de lo aprendido. Es el grupo quien debe lograr la cualificación mínima exigida. No el individuo.  Lo que importa es que el grupo sea capaz, no que la institución elimine los menos hábiles. Aunque si hay alguien que definitivamente no logra la idoneidad básica requerida, perjudicando al grupo, el individuo sabe, por sí mismo que debe autoeliminarse por honor, no la institución expulsarlo.

Aunque ella, de todas formas se reserva, pero de última y remota instancia, la potestad de expulsión. Eso crea empatía grupal desde un comienzo para la larga y exigente vida militar, qué es lo fundamental. Más que algunos pocos muy brillantes, lo que se busca es el mejor promedio colectivo. Qué es lo que da el máximo poder final de una fuerza militar. A eso se debe el alto nivel de exigencia académica sobre los alumnos que, luego, ocuparan, los altos cargos de dirección. Que requieren ser multifacéticos y polifuncionales, como lo exige el ser un buen comandante y líder militar.

La vida militar profesional no es la fase donde se detiene el aprendizaje y se inicia la aplicación de lo que se va aprendiendo. Es la continuidad de esa misma academia. Al tiempo que se aplica lo aprendido. Porque el aprendizaje nunca se detiene. Perdura hasta el fin. En ese trascurso, prosigue el mismo proceso de autocalificación donde se cierne el material más liviano. Solo permanece lo más grueso y pesado de mayor valor sobre el cedazo. Por eso son tan pocos los que, finalmente, llegan a los más elevados cargos y grados después de una muy larga carrera militar profesional.   

Me encantaba ser piloto de un helicóptero de combate porque mi mecánico de vuelo volaba conmigo. Así todos dependíamos de todos. Este nivel de cooperación no lo encuentras entre los individuos que trabajan en corporaciones.

Nota: Algunos alumnos militares frustrados luego se hacen ricos en la vida civil. Pero siguen incompletos en su parte intelectual. Algunos se refugian en la vida religiosa fanática para compensar esa insatisfacción, material o espiritual. Lo que no se da en la vida militar cuando se vive correctamente.  Por ello en ellas se es feliz, aunque no rico, que es el fin deseable.

Sencillamente los líderes militares lideran a través de la misión. Los corporativos a través del dinero. Cuando conozco empresarios que no tienen entrenamiento militar, noto que casi todos le dan mayor importancia a los cheque de nómina y a las opciones de acciones, en lugar de la misión. Los integrantes de sus equipos seguirán haciendo lo que líder quiera, siempre y cuando los cheque de nómina sigan llegando.
Todos los empresarios deben ser líderes. Es obvio que los empresarios deben correr riesgos, precisamente, los mismos que los empleados evaden.

Nota: tienen dos opciones. El primero es El liderazgo positivo. El liderazgo merecido. La gerencia por convicción, inspiración, motivación, interno, paternal, ecuánime, justo, prudente, respetable, delegante, apreciativo, amigable, constructivo o pedagógico. El segundo es el liderazgo negativo. El liderazgo delegado pero no merecido. La gerencia por imposición. Del miedo. Por intimidación, persecución, externo, castigador, acusador, posesivo, hostil, restrictivo, despreciativo, punitivo, destructivo, ni educante ni constructivo.

Liderazgo diferente.

Muchos líderes empresariales creen que liderazgo consiste sólo en decir que hacer, pagarles más a sus empleados, amenazar con pagarles menos o despedirlos. Otros líderes tienen el poder de generar fanáticos. Es decir clientes internos que le juran devoción y lealtad infinita a la empresa y a la marca. Y continúan siempre trabajando para ella. Con clientes que siguen comprando sus productos. Algunas empresas no tienen diferentes productos porque sus leales clientes simplemente les siguen comprando.

Es importante que conozcan las diferencias entre vender y motivación. Entiendan. Mi primer comandante fue un líder inspirador que nos inspiró que volar era luchar y por eso lo logramos. En otro escuadrón, esos mismos pilotos odiábamos al comandante. No confiamos en él. Nos manipulaba, intimidaba, para que hiciéramos lo que quería.

Nota: el alumno que hace trampa es la del incapaz para superarse y cree que lo mejor es luchar y vencer a la institución. Si es preciso  con engaño. En lugar de luchar para vencer su ignorancia y dejar de engañarse. Hay dos formas de competencia en las escuelas militares: la externa. Que se hace contra la institución o contra un número: La calificación de “calidad mínima exigida”. La competencia interna: contra sus compañeros o el promedio académico del grupo. En la primera, es una batalla solitaria. En la segunda, una superación colectiva. Algunos líderes dirigen por medio de la intimidación y otros por medio de la inspiración.

Liderazgo corporativo, versus, liderazgo militar.

Me tomó aproximadamente un año entender la diferencia entre el mundo militar y el corporativo. En el ámbito militar el liderazgo interno y en el corporativo el externo. La cultura militar se les inculca a los alumnos nuevos noche y día.

Nota: Los líderes militares provienen del interior de la organización no del exterior.
Razón por la cual las escuelas superiores militares son “internados” en la mayoría de los países. Porque se requiere una dedicación absoluta y de tiempo completo, al aprendizaje y el entrenamiento. Muchas le borran la cinta de lo aprendido por el alumno antes de ingresar, en cuanto el comportamiento, para generar una nueva y diferente actitud y aptitud. Es un adoctrinamiento total. 

Nota: hay dos formas de liderazgo. Según la procedencia: el del escalafón. Que es interno. Predica y practica. Lo vive. El importado que es traído del exterior. Sin escalafón. No predica ni practica. No lo vive.

Los líderes vienen con frecuencia del exterior en el mundo civil. En el mundo corporativo se contratan directores generales que vienen de afuera y que casi nunca conocen la cultura de la organización.
Ambos los analizamos y discutimos. Además los temas internos que nos mantienen en contacto. Porque predicamos el liderazgo interno. Lo militar es una empresa dedicada a la educación y a la cultura empresarial que debemos inculcar y apoyar.

Nota: hay dos formas de liderazgo. Según su naturaleza: El liderazgo educativo, cultural, ilustrativo y motivador de su propio negocio. Que practica la asesoría interna y vertical. La que acontece en la línea de autoridad como un proceso de aprendizaje continuo. Y el liderazgo no ilustrativo. Que es todo lo contrario al anterior. Por eso este tipo de dirección reúne la gente para decirle lo que debe hacer pero no la motiva para que todos los empleados se convierten en empresarios. El interempresarial.

Por eso nosotros los animamos a solicitar asesoría a nuestros directores.

Todas las personas que han prestado sus servicios en las Fuerzas Armadas saben que las ramas militares son organizaciones eminentemente educativas y que aprenden de manera constante. La cultura militar es una cultura de la educación, empezando desde el primer día.



1 APRENDER VIENDO

Si quieres ser un empresario exitoso, te sugiero adoptar el corazón de la cultura militar de la educación y el entrenamiento constante. Y que difundas esa cultura a tu negocio. La mayoría de los civiles nunca han trabajado en el marco de una cultura de educación y entrenamiento constantes.

Y para las Fuerzas Armadas, tengo buenas noticias: ustedes ya cuentan con la educación, entrenamiento, la voluntad espiritual y el sentido de misión requerida para soportar el rigor que implica ser empresario.

Debido al aumento del desempleo juvenil, actualmente tenemos una generación perdida que desaprovechó la oportunidad crucial de tener experiencia en la vida real. Porque están desempleados o estancados en un empleo que no representa un desafío para ellos. Y, lo más probable, continuarán batallando por el resto de sus vidas.

¿Se va a repetir la historia?

La relación entre el alza del desempleo en Alemania y el partido nazi demuestra que, Nota: el desempleo bajó justo cuando el partido nazi sobresalió porque la gente estaba necesitada de trabajo y eso fue lo que ofreció el partido nazi (no subsidios). Y la gente con empleo estaba decidida hacer cualquier cosa que le dijeran por gratitud al favor. Así la motivación fuese el fanatismo nacionalista y la superioridad de la raza.

El terrorismo es una guerra de la era de la información. Dirigida por gente enojada y con frecuencia pobre, que tiene acceso a la tecnología de bajo costo y alto desempeño. Los teléfonos celulares pueden ser más poderosos que las armas nucleares y que el terrorismo de la era de la información. Cuando se puede propagar con rapidez y crecer de una forma virtualmente invisible.

Aunque algunos de los estudiantes que abandonan la escuela antes de terminar llegan a tener vidas maravillosas, a largo plazo. Pero un alto porcentaje, termina sin empleo, sin hogar, dependiendo de la ayuda de sus padres, del gobierno o en la cárcel.

Estados Unidos en la actualidad

La historia demuestra que la duración media de los empleos es siempre altas después de las recesiones.

¿Quién está aniquilando nuestros empleos?

Mientras los veteranos de guerra servían al país, los líderes corporativos estaban enviando los empleos al traste. De acuerdo con las investigaciones, el objetivo principal de la subcontratación era la reducción de costos de operación. Sólo un porcentaje relativamente pequeño, poco más de 10%, expresó que había contratado para tener acceso a habilidades de clase mundial. Esto significa que las compañías subcontrataban para ahorrar dinero, no para manufacturar mejores productos.
Y cada vez que los empleos se fugan. Nota: la tasa de impuestos sufre un incremento.

Solicitamos sus servicios de nuevo

Estados Unidos están en problemas: necesita empleos. El mundo realmente necesita empresarios que sean capaces de generar empleos sustentables. Prosperidad perdurable y verdadera. Cada vez que el gobierno genera empleos, los impuestos aumentan. Nota: el monto.

Cuando los impuestos aumentan, las cosas se hacen más costosas. La gente sufre y la economía sufre el país se debilita. En cambio cuando los empresarios generan empleos, esos empleo generan impuestos, la deuda disminuye, la exportación aumenta, al importación disminuye y el país se fortalece. Nuestras Fuerzas Armadas tienen las cualidades y entrenamiento específico que les permitirá ser grandes empresarios.

2 OCHO LECCIONES DE LIDERAZGO MILITAR



La forma en que las Fuerzas Armadas entrenan
Empresarios de excelencia

Existen cuatro formas distintas de inteligencia: la inteligencia física. La inteligencia mental. La inteligencia emocional y la inteligencia espiritual.


Inteligencia física. El empresario debe tener la noción de cómo se hacen las cosas. Es decir, el conocimiento de cómo producir. El éxito sólo puede lograr si sabes lo que haces. Winston Churchill dijo: en la noche dormimos a salvo gracias a los rudos hombres que están preparados para usar la violencia en contra de quienes desean hacernos daño.

Para que la verdadera educación funcione, tiene que inspirar las cuatro inteligencias. El problema de la educación tradicional es que la escuela se enfoca principalmente en inteligencia mental y casi no le presta atención a las otras. La inteligencia mental proviene de la escuela tradicional.

El proceso de aprendizaje depende más de la inteligencia física que de la emocional. A la inteligencia física también se le conoce como memoria muscular porque está basada en la repetición hasta que los músculos recuerden el proceso físico adecuado.

El cono del aprendizaje es un triángulo isósceles invertido. Con la base arriba y la cúspide abajo. Una pirámide invertida. Nos muestra como el aprendizaje de lectura y escritura está en la parte más baja. Porque lo que aprendemos mecánicamente sólo retenemos el 20% de lo que leemos, escribimos y escuchamos. Mientras que la parte superior, donde está la simulación y la vivencia de la experiencia, que son la manera más eficaz debe aprender, se retiene el 90% de lo que decimos y hacemos. Es decir aprendizaje físico porque estamos ejecutando algo Porque aprendes más cuando haces algo.

Nota: El nivel más alto del aprendizaje se logra con la simulación. La simulación es la forma en que se enseña y se entrenan las instituciones militares, en especial la aviación. Los simuladores allí son muy usados porque se pueden practicar las emergencias simuladas peligrosas sin tener que arriesgarse a perder la vida, como podría suceder si se hicieran en el vuelo real.

En la educación tradicional cada vez que el niño comete un error, lo castigan. Por eso muchos estudiantes se gradúan pero sólo después de haber memorizado todas las respuestas correctas. Pero que luego son incapaces de hacer gran cosa en la realidad. Igualmente, el estudiante que comete demasiados errores se le califica lento y estúpido.
En la vida real quien comete más errores y aprende de ellos, es el que llega ser exitoso. Nota: Porque aprendieron la capacidad de fracasar con frecuencia. A aprender del error y a sacar provecho de la adversidad. 


FORJANDO LA VOLUNTAD

En las Fuerzas Armadas primero te hacen colapsar y te quiebran para luego fortalecerte usando las cuatro inteligencias y así reconstruirse como ser humano más fuerte. Un joven que no tiene lo que necesita para desempeñarse en el servicio militar probablemente tampoco tiene lo que necesita para ganarse la vida. Entre los rechazados de las Fuerzas Armadas se encuentran los desempleados acérrimos del mañana. Por eso cuando salí de las Fuerzas Armadas, todavía tenía mucho por aprender. Por eso continué estudiando y lo sigo haciendo hasta la fecha.

Nota: Porque a pesar de la instrucción militar tuvimos que aprender las dos cosas cómo vivir en la vida militar y la civil.

Pero sabía que la educación y el entrenamiento militar me prepararon para la vida del empresario con:

Inteligencia mental: Es la menos importante para el éxito empresarial porque, al igual que el verdadero líder, el empresario no tiene por qué ser la persona más inteligente del equipo. Eso significa que un verdadero empresario debe ser un líder y tener inteligencia suficiente para dirigir, en el campo de batalla de los negocios, a personas más listas y con mayor preparación que él. Puedes comprar habilidades y destrezas pero el espíritu de lucha no se puede comprar. Ni la fuerza para seguir luchando donde todo se acabó. La actividad empresarial es el elevador de la gente rica. Y la educación, el de la clase media.
Nota: Hay que rodearse de personas que saben más que uno.

La inteligencia emocional: Es la del verdadero liderazgo. Exige la persona con suficiente inteligencia emocional. Puede enojarse pero no tanto como para hacer o decir algo estúpido, porque son personas que se logran controlar. El entrenamiento militar es extraordinario para desarrollar la inteligencia emocional. La gente con inteligencia emocional, prefiere alejarse que dar un golpe. Escuchar en lugar de discutir. Ver desde el punto de vista de la otra persona en lugar de defender el suyo. Y realiza un excelente trabajo sin esperar halagos a cambio.

Saber cómo mantenerse tranquilos en lugar de reaccionar bajo presión. Deben saber cuándo esperar y cuándo atacar. El entrenamiento del servicio militar no elimina el miedo, sólo te enseña a pensar y funcionar, a pesar del miedo. Para ser un empresario exitoso se necesita desarrollar inteligencia emocional de manera permanente. Los verdaderos líderes tienen un coeficiente emocional alto.



APRENDIZAJE INTELECTUAL

La inteligencia espiritual: la inteligencia espiritual se localiza en el corazón que es donde está el coraje. Las Fuerzas Armadas desarrollan inteligencia espiritual en los nuevos reclutas para que funcionen con un sentimiento de propósito inteligente y poniendo siempre la misión por encima de su propia vida.
Es la más importante dentro de las que necesitan los empresarios. Se requiere de una noción fuerte de lo que es la misión y el compromiso para lograr un objetivo. Por eso el general Mac´Arthur dijo: Entrar a una guerra sin la voluntad de ganar, es fatal.

Misión, valor, sacrificio

“El objetivo de la guerra no es morir por tu país, sino hacer que los demás mueran por el suyo”. George Patton.

Me tomó algún tiempo aprender a trabajar con civiles. Con los que antes fueron hippies. Gente que nos escupía y nos llamaba asesinos de bebés. Entonces noté que sucedía por falta inteligencia emocional. Muchos integrantes de la clase empresarial reflejan una sola emoción: miedo.

“Me escandalizaba escuchar a la gente decir: No puedo. Tal vez pueda. Lo voy intentar. Quizás lo haga y espero que.” La gente pobre dice: No puedo pagar tal cosa, con más frecuencia que la gente rica. La gente que tiene dinero se pregunta ¿Qué necesito hacer para darme ese lujo?

Y sin embargo en las Fuerzas Armadas hay gente que sólo permanecen en la institución militar para acumular los 20 años que necesita para jubilarse. A pesar de que los líderes de las Fuerzas Armadas hablan con palabras espirituales que provienen de su corazón y se originan en el alma.

Tu país te necesita

Muchos estadounidenses desprecian a los militares y, claro, tienen el derecho a hacerlo. El derecho a hablar con libertad es una de las libertades que protegen los hombres y las mujeres que pertenecen a las Fuerzas Armadas. Las fuerzas  militares no luchan para los liberales ni para los conservadores. Luchan para una nación.

“Libertad” es una palabra monumental

La libertad religiosa. Las fuerzas militares también luchan para que la libertad religiosa pueda ser un catalizador de conflictos. En otras partes lo hacen pero para evitar que exista la libertad religiosa.

La libertad política. En algunos países, fundan su propio partido, buscan pensión de por vida o que te asesinen los militares.
El general William Westmorelan, dijo: No son los militares quienes inician las guerras, sino los políticos.

La libertad de expresión. En 1973 aterricé en la base Norton de la Fuerza Aérea en San Bernardino, California. Afuera había gente manifestándose contra la guerra de Viet Nam. Pude ver el miedo y la ira en los ojos de mis hombres. Uno de ellos dijo: ¿Por qué luchamos por esta gente?

No luchamos por “esta gente”, le expliqué. Luchamos por toda la gente. Por la libertad y para que todos puedan decir lo que quieran. Incluso si no nos gustan ni a ustedes ni a mí. Peleamos por la libertad y no sólo por la de algunos grupos específicos. Entonces los demás hombres que nos escucharon contestaron: Sí, señor.
Les di las gracias por sus servicios y por lo orgulloso que me sentía de haber luchado a su lado. Entonces todos ellos caminaron entre los manifestantes con la cabeza alta, la espalda derecha y la mirada fija, sin decir nada cuando los escupieron, lanzaron huevos y los insultaron.
Es la libertad la que defiende y protege las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos.

Un empresario puede contratar o despedir a cualquier persona en cualquier país. A esto se le llama libre empresa. Y a la libre empresa se le conoce como capitalismo.
Si no tuviéramos unas Fuerzas militares fuertes, a nuestra economía la controlarían los grandes señores de la guerra. De la misma manera que lo hacen las corporaciones que dirigen en los países en donde su Fuerzas Armadas son débiles o corruptas. Es decir a su libre capricho y abusando de esas oportunidades de libertad que le da capitalismo.

El concepto de la libre empresa es la base del sueño americano. Y eso significa que una persona puede venir a Estados Unidos y, tal vez, convertirse en parte de la realeza. El capitalismo es un sistema económico que permite que los negocios le pertenezcan a un particular. Lo anterior significa que un particular puede hacer negocios en cualquier parte. Por eso no sorprende que los sindicatos estén en desacuerdo con esa libertad.

Así, nuestro país, se tiene la libertad de ser capitalista comunista, socialista, rico, pobre, clase media, cristiano, musulmán, judío, etc. Entonces las Fuerzas Armadas luchan por defender esas libertades y derechos. Por eso las Fuerzas Armadas estamos dispuestas a dar la vida por esas libertades.

Y por eso escribí este libro para solicitarte que vuelvas a prestar sus servicios después de haber estado en sus filas, porque la nación necesita tu ayuda. Y se lo dedico a los hombres y mujeres de nuestras Fuerzas Armadas. Y por esa razón también te pido considerar la opción de volverte empresario para servir más a tu país. Porque tú ya cuentas con el entrenamiento de los instintos básicos para ser un empresario asombroso. Porque son los verdaderos empresarios quienes generan empleo como prosperidad real.

El general Douglas Mc Arthur nos advirtió: “Me preocupa la seguridad de nuestra nación. No tanto por la amenaza de afuera, sino por la insidiosas fuerzas que operan en el interior”.

Capítulo dos

Cómo convertirse en empresario

Cualquiera puede llegar a ser empresario. Hay empresario de todos colores y sabores. La mayoría de los negocios son pequeños y sus operaciones las dirige una sola persona o mamá y papá. Algunas personas, sin embargo, construyen mega negocios y logran cambiar el mundo.

Hay mucho que aprender y siempre recomiendo estudiar. Te sugiero que cuanto decidas en qué tipo de negocio quieres involucrarte, empieza a trabajar para alguien que ya esté en ese negocio. Por ejemplo, si quieres montar un restaurante, consigue un empleo en uno y trabaja para aprender todas las facetas del negocio.

Cuando trabajas para aprender ganas algo que es mucho más importante que el dinero: obtienes sabiduría, experiencia y el instinto creativo. Tal vez el salario no sea muy bueno, pero la educación y la experiencia son invaluables.

La gente que tiene doctorado cuenta con preparación académica, pero carecen del entrenamiento. No es que lo que sepas es lo que pueda llevarte a ser rico. Más bien, lo que no sabes es lo que te vuelve pobre. La mayoría de los empresarios fracasa debido a la falta de experiencia, no de dinero. Por ello, si cuentas con experiencia siempre puedes generar más recursos.

La primera habilidad que debe tener un empresario es la de vender. Porque las ventas es = ingresos. Por esta razón Donal Trump y yo recomendamos el mercadeo en redes o multinivel, el cual sirve para mejorar tus habilidades de ventas y el liderazgo. Los empresarios fracasan principalmente porque les aterra el rechazo, porque el miedo los paraliza. Porque tienen que enfrentar su falta de habilidades de comunicación para hacer una presentación.

Cuando salí de la infantería de marina fui a trabajar a Xeros. No tanto porque tuviera que ver con el dinero sino con la educación que iba recibir en ventas y la experiencia en el mundo real. Y cuando pedí un consejo para ser mejor vendedor se me dijo: “tu problema es que tu índice de fracaso es muy bajo. Si quieres aprender tienes que fracasar, con rapidez”.

Mi instructor de vuelo me hizo estrellar, simuladamente, mi aeronave cada vez que volaba porque quería asegurarse de que me convertiría en un experto en afrontar emergencias. Después, en la operación real, chocamos en la parte trasera de un buque de la armada debido a una falla total de los sistemas hidráulicos. Supimos, después, que somos los únicos pilotos que hemos sobrevivido a una falla de tal gravedad. Porque según los expertos en esas condiciones el helicóptero Huey no vuela.

Entonces los negocios no fracasan por falta de dinero sino de experiencia en el mundo real. En el mundo de los negocios. Esto se aprende cayendo y volviendo a levantarse bastantes veces. Y por eso se le llama “espíritu empresarial”.

El poder de los mentores

Un mentor equivale a alguien que ya llegó al lugar adonde tú quieres ir. Alguien que enfrentar los desafíos con que te vas a topar y que además encontró soluciones que realmente funcionan. Te sugiero que escribas un plan educativo. Cuando lo haces descubres que necesitas aprender muchas cosas y entonces tu plan educativo será la guía para tu programa del desarrollo empresarial.

La ley de la compensación

Los creadores de Apple trabajaron muchos años en una cochera construyendo algunas computadoras burdas que le servían de pasatiempo. Con el tiempo se convirtieron en multimillonarios trabajando en su cochera.

Yo creo que el fracaso es el camino al éxito. Una de las razones por las que mucha gente inteligente, a la que le fue bien en la escuela pero no se volvió rica, es porque en la escuela le enseñaron que cometer errores significa ser estúpido. No entiendo por qué la educación tradicional castiga los estudiantes por cometer errores. Si muy pocos de los empleados que cuentan con título de maestría son líderes. Nota: Y muchos líderes no tienen títulos

Henry Ford fracaso cinco veces antes del nacimiento de su compañía. Thomas Edison fracaso más de 1.000 veces antes de inventar la bombilla eléctrica pero fundó General Electric. A ese valor para fracasar se le conoce como espíritu empresarial.

Nota. Es la capacidad de tolerancia al fracaso y el ser capaz de sacar provecho de la adversidad. Porque cuando logran el éxito sienten más satisfacción que cuando no han tenido malos momentos.

El general Colin Powell dijo: El éxito no tiene secretos.

El éxito del resultado de la preparación, el trabajo arduo y el aprendizaje a través de los errores. En las Fuerzas Armadas pasamos la mayor parte del tiempo estudiando y practicando en lugar de luchar. Por eso las instituciones militares son poderosas, eficaces y letales.

El ser empresario consiste en crear procesos de negocios, pero no en administrarlos. Una vez que se inician los procesos, debes contratar administradores para cada uno. En cuanto los administradores comienzan a dirigir un negocio puedes planear maneras para hacerlo crecer. De esa manera puedes mover y echar a andar el siguiente proyecto.

Los empresarios deben aprender constantemente sobre temas como el panorama general del negocio, innovación, oportunidades a nivel global y mercados. Por eso los empresarios son “generalistas”. Los administradores o ejecutivos, en cambio, son “especialistas” porque se enfocan solamente en un proceso como la comercialización o la contabilidad. Por eso, yo cuento con un equipo de asesores porque no soy el más inteligente del grupo. Si cuento con un equipo de especialistas, entonces, no tengo por qué serlo.

Nota: El operario es “monofuncional”. El inversionista “polifacético”.
Siclo del directivo: Operario. Administrador. Empresario. Inversionista. OAEI.

Los verdaderos empresarios son generalistas. El generalista sabe poco acerca de muchas cosas. Nos encontramos en problemas porque muchos de nuestros líderes carecen de educación y desarrollo “multidimensional”. Los ejecutivos en cambio, son especialistas. El especialista sabe mucho de su campo pero sabe poco del contexto general.

Nota: El operario no sube ningún escalafón. El empresario es un océano de extensión con un centímetro de profundidad. Pero con la habilidad de mantener calmado todo el océano. Es un personaje polifacético y multifuncional,

El empresarios educa para la dirección del negocio y se entrena escalando posiciones desde el nivel del operario recorriendo todo el escalafón.
El administrador hace lo mismo. Pero se especializa y se detiene en algún nivel o nicho de confort.
Suelo decir que la carrera profesional de la Administración de Empresas o negocios, es la especialidad de la generalidad. Y que las demás profesiones son formas especializadas de administrar conocimientos puntuales. 

En la preparatoria, por ejemplo, era un fracaso total pero cuando vi que a mi helicóptero le colocaron ametralladoras y cohetes, de pronto me convertí en un estudiante extremadamente activo y bien enfocado.

Si crees que ya sabes todas las respuestas lo más seguro terminarás perdiendo tu dinero. Lo sé porque en el proceso de adquisición de mi educación empresarial he perdido mucho dinero tratando de aprender una lista infinita de cosas en profundidad que, después, yo mismo no podía aplicar.

En la guerra el enemigo y los teatros de operaciones siempre están cambiando y mejorando. Por eso la educación general es vital para el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas y de las empresas. Ser empresario, sin duda exige más estudio que ser empleado. Y al inversionista más que el empresario. El saber no te asegura que serás rico, pero la ignorancia si te empobrecerá con certeza.

El cuadrante del liderazgo

Son las cuatro esquinas de la cruz. En el lado izquierdo está: en el cuadrante superior, el Empleado. Y en el inferior el Administrador.
En el lado derecho: en el cuadrante superior está el Dueño, autoempleado o empresario. Y en el inferior, el Inversionista. E – A – D – I.

Nota: la mayoría (95%) de los colombianos que dicen ser empresarios, por ser dueños, sólo llegan a ser autoempleados. Son negocios pequeños administradores –dueños-autoempleados, al mismo tiempo. Muchos no han recibido academia gerencial ni de gestión ni liderazgo ni tienen como cultural la autoeducación.
Muchos se han preparado en otras profesiones especializadas como el derecho, las ingenierías o tecnologías. Pero son empíricos en capacidad de manejo global y del liderazgo empresarial.

La distribución porcentual de las cargas, en especial la tributaria, entre los cuatro cuadrantes es de: 40%. 60%. 20% y 0% respectivamente. Una de las cargas en la cual es débil el Empresario es en su habilidad para pagar impuestos porque se requieren mucha inteligencia financiera para hacerlo de forma legal. Por esta razón la mayoría de los negocios pequeños son quienes pagan la mayor cantidad de impuestos y eso les impide ser Inversionistas.

Sin embargo hay muchos empresarios exitosos que ganan mucho dinero pero siempre se están quejando de la enorme cantidad de impuestos que paga. Irónicamente, la gente que más pagan impuestos es la que tienen empleo, ahorra dinero, invierte en sus planes de jubilación y eso es simplemente muy injusto.

Nadie dijo que la vida era justa. Pero nuestras Fuerzas Armadas luchan para que tenga la libertad de elegir una vida como empleado o empresario o inversionista. Si luchamos para que todo fuera justo, que nos habríamos convertido en una sociedad socialista o comunista.

Por eso el concepto presente del trabajo seguro es sólo para la gente que vive en el pasado. Entonces las Fuerzas Armadas hacen un gran bien cuando enseñan a sus jóvenes reclutas a controlar sus emociones, ya que esto incrementa su inteligencia emocional. La gente que vive con miedo de perder su empleo, tiene poca inteligencia emocional. Puedes tener una sólida preparación académica y ser bueno, honesto y trabajador, pero cuando tus emociones rigen tu vida tu inteligencia emocional baja.



GANAS DE VENCER

El Viet Cong (las fuerzas de Vietnam del Norte) luchaba, con más ganas que nosotros porque sus soldados contaban con motivación espiritual. Es decir sus ganas de vencer era más que las nuestras. Estaban cansados que los extranjeros les dijeran que hacer. Su situación no era muy distinta a la de los primeros revolucionarios norteamericanos que sacaron a los ingleses en Norteamérica. El general George Marshall dijo: “El poder militar gana batallas, pero el poder espiritual gana guerras”.

Yo estaba exento de ser reclutado porque pertenecía la clasificación “industria vital no defensiva”. Y como tripulante de petroleros era un trabajo muy bien pago. Pero tal vez mi necesidad de servir y luchar estaba arraigada en mi herencia samurái. Muchos de mis familiares habían estado en distintas guerras desde mi tatarabuelo. Por eso renuncié y me enlisté en la escuela de vuelo de la armada en Pensacola, Florida.

No tenía idea de que en mi entrenamiento militar me estaba preparando para convertirme en empresario y un hombre libre y adinerado. Hoy en día no trabajo tan arduamente porque necesite más dinero, pero si porque tengo una misión. Como cuando estaba en Viet Nam.

 Ahora que serás empresario debes comenzar por elegir tu misión espiritual que viene el corazón y el más importante que el dinero. Por supuesto que este último es el combustible del negocio. Sin embargo, la misión es la motivación para mantenerse en pie. Ser empresario es mucho más difícil que ser empleado. El entrenamiento es una ventaja increíble. Y aunque no te garantiza el éxito, te ofrece una base muy sólida para construir su negocio.

Segunda parte
Ocho lecciones del liderazgo

Los líderes son modelos a seguir

A muchos les gustaría volverse empresarios pero carecen de las habilidades, el valor y la disciplina necesarios para sobrevivir en el mundo de los negocios. Muchas personas se aferran a la supuesta seguridad del empleo dijo porque su miedo a fracasar es mayor que la alegría que llegarían a tener si se liberaran de sus miedos.

Las escuelas tradicionales preparan a los estudiantes para que se conviertan en empleados. Las escuelas militares los preparan para convertirse en líderes. El liderazgo consiste en ser un modelo a seguir, en vivir la vida con estándares más altos. En la escuela militar el tema del liderazgo no era una materia más sino un proceso de formación. No eran lesiones de un texto filosófico sino que eran enseñanzas que se practican.

En el lado derecho del cuadrante del flujo del dinero. Es decir, el compuesto por D y por I se conforma con las integridades esenciales para el éxito. Si un negocio tiene problemas, es porque una o más de esas ocho integridades faltan o no son suficientemente sólidas. Ellas son:

A.    Las escuelas tradicionales se enfocan en.

1 El producto: Al contrario de la que de lo que la mayoría piensa no es el más importante. El producto no tendrá mucho éxito si no cuenta con un triángulo sólido del dueño y del inversionista.

2 Asesoría legal: los abogados son importantes porque protegen tu producto y el resto del triángulo: Dueño – Inversionista.

3 Sistemas: Todo negocio necesita profesionales entrenados en áreas específicas para que operen los sistemas, ya sea de cualquier tipo. Ingeniería, tecnología, informática, los actores son, comercialización y demás.

4 Comunicación: Los negocios dependen totalmente la comunicación vertical tanto ascendente, descendente y horizontal. Si la comunicación es deficiente, la empresa también lo será.

5 Flujo del dinero efectivo: por supuesto que el que entra debe ser mayor que el que sale con un sistema contable preciso y claro.

B.    Las academias militares se enfocan en:

6 Misión: La misión espiritual, mental. Se debe memorizar repitiéndola hasta que quede permanentemente implantada en cada uno de sus componentes.

7 Equipo: Es la parte material que representa el poder. Entre más unido seres más fuerte porque el equipo es más importante que el individuo.

8 Liderazgo: Es la parte funcional donde los líderes son modelos a seguir. El liderazgo se gana por medio de la confianza, el respeto, la experiencia y la competencia. La actividad es compartida y entonces el éxito es grupal. No individual.

La misión, el equipo y el liderazgo son esenciales y por eso nos inculcaron la idea de que los individuos tienen muy poco vigor. La vida depende de que los individuos trabajen como equipo bien dirigidos.