AERONAUTAS Y CRONISTAS

domingo, 1 de diciembre de 2013

EL LIBRO ROJO DEL PUTUMAYO. CAPITULO 2


CAPITULO 2

 

·       Comentario: como Arana sabía la gran rentabilidad del negocio del caucho, de la necesidad que tenían los británicos del producto, del sólido apoyo que recibiría si la empresa fuese un negocio británico y del peligro que se cernía por sus métodos de explotación inhumanos, registró su empresa en Inglaterra. Lo que no previó Arana fue que en Inglaterra existía una influyente sociedad antiesclavista dispuesta a presionar al gobierno para intervenir en el asunto.

·       El gobierno británico encargó investigar la empresa Arana a su cónsul, en Río de Janeiro, sir Roger Casement y a finales de 1910 se encontraba en La Chorrera, corazón de operaciones de la Casa Arana. Era un investigador experimentado ya que había hecho un trabajo similar en el Congo. Comprobó de manera contundente los cargos hechos por Hardenburg y que el sistema de explotación cauchera estaba montada sobre la sistemática explotación de los indígenas.

·       En el mismo año Vicente Olarte Camacho publicó un libro titulado: “Las Crueldades en el Putumayo y en el Caquetá”. (El titulo del libro muestra como Arana ya había invadido el territorio colombiano del Caquetá)

·       El Perú también mandó un investigador, Rómulo Paredes, quien en marzo de 11 concluyó que en el Putumayo se matan indios porque trabajan. Debido a estas averiguaciones la mayoría de los responsables de los asesinatos y otros vejámenes habían huido y abandonado el Putumayo.

·       En ese mismo año, Colombia organizó una expedición militar al Amazonas con el fin de reforzar su puesto fronterizo de La Pedrera. Ello desencadenó una fuerte reacción peruana que culminó con un combate en dicha población. La reducida guarnición colombiana fue desalojada por un continente más grande y mejor armado de peruanos. Poco tiempo después la guarnición fue recuperada por los colombianos.

 

 
IMAGEN 2

 

·       El cónsul norteamericano, Fuller, en Iquitos, conceptuó:

o   que los peruanos blancos consideraban a los indios como servidores naturales que carecían de derechos.

o   La economía regional estaba basada en la servidumbre de los indígenas por medio del anticipo de bienes y el previo endeudamiento.

o   En la crisis generalizada del caucho amazónico inducía a que la élite regional practicara un estricto control de la fuerza de trabajo aborigen.

o   Que los grandes caucheros Iquitos temían que el maltrato efectuado en el Putumayo erosionar en su propio poder. Y Arana no sólo tenía influencia en Lima sino también en Iquitos. Y que el Putumayo era su estado, puesto que jueces, guarniciones militares y demás funcionarios dependían en muchas formas de la Casa Arana.

·       Las investigaciones de Casement fueron publicadas en 1912 en la prensa como crónicas y denominadas como: “Libro Rojo del Putumayo”, que ponían en la picota a las autoridades del Perú. A mitad de ese mismo año, el Santo Padre publicó su encíclica: Lacrimabili et Statu, donde condenaba el genocidio en el Putumayo. El Congreso norteamericano público un informe titulado: “Slavery in the Putumayo”. También llamado: “El Libro Blanco”. En ese año el gobierno colombiano también publicó el libro: “La Soberanía de Colombia en el Putumayo” donde denunciaba los crímenes en esa región. (El poder de los libros).

·       En 1913 se publicó en Londres el libro. Titulado: El Libro Rojo del Putumayo. Presentó el punto de vista colombiano sobre el genocidio del Putumayo justo en el momento en que se debatía la responsabilidad de Arana, su compañía la Peruvian y del gobierno del Perú. En él se denunciaban las pretensiones del Perú sobre el Putumayo. Buscaba que se castigará a los criminales peruanos y mostraba los derechos de Colombia sobre el Putumayo, la favorable política indigenista de Colombia y el buen comportamiento de los caucheros colombianos con respecto a los nativos.

·       Arana logró sobrevivir a las acusaciones. Pero en 1917 una gran rebelión indígena contra los caucheros culminó con una espantosa masacre de nativos cometida por las huestes de la compañía Peruvian con la ayuda del ejército peruano.

·       En 1924 José Eustaquio Rivera publicó el libro: “La Vorágine”. Uno de sus propósitos fue el de poner al descubierto la situación social de los caucheros. En ese año, se firmó el tratado Salomón Lozano, donde Perú reconoció los derechos de Colombia al norte del río Putumayo. En 1928 ante la inminente ratificación del Congreso peruano, la casa Arana inició el desplazamiento forzado de toda la población indígena de la región reconocida al sur del río Putumayo por ser área peruana y donde recibía el apoyo de las autoridades de ese país. Por ese éxodo hacia la región meridional del Putumayo, los nativos abandonaron sus casas y territorios, siendo diezmados por las enfermedades y la improvisación y precarias condiciones encontradas en los nuevos asentamientos.

·       La toma sorpresiva de la población de Leticia, por parte del ejército peruano, en 1932 precipitó la guerra entre las dos naciones. Durante las hostilidades, las tropas colombianas ocuparon algunos campamentos caucheros de la Casa Arana y rescataron un cierto número indígenas que pretendían regresar después de la deportación forzada. Estando de regreso en sus antiguos territorios fueron la semilla de las actuales comunidades de la Amazonia colombiana.

·       En 1938 el gobierno colombiano compró los supuestos derechos de la Casa Arana (mejoras) por un total de $200,000. Esto se efectuaron en varias cuotas y en 1964 los herederos de Arana recibieron el último pago restante. En 1988, el presidente Barco ordenó la conformación del llamado: resguardo del predio Putumayo, basado en la antigua área de jurisdicción de la Casa Arana.

·       Estas páginas demostrarán la prioridad de los derechos de Colombia. Se verá que el territorio de Colombia a sido usurpado por el Perú por la fuerza de las armas, y que se han llevado a Iquitos, como prisioneros, muchos de los colonizadores colombianos del Putumayo. Este libro fue publicado por qué fue evidente la imposibilidad de esperar reformas efectivas del gobierno peruano demostradas en el Libro Azul. Las tesis ésta sustentada en que si es suspendida la exportación de caucho, las atrocidades cesarán automáticamente y descalificarán la idea errónea de que el Putumayo es territorio peruano.

·       El papel pasivo de Colombia y el papel curiosamente activo del Perú en los acontecimientos del Putumayo, constituyen un escándalo infinitamente más grande que el que se deriva de la explotación comercial de la región cauchera, por individuos que perseguían ganancias puramente personales. Un grupo de aventureros inescrupulosos que no vacilaron recurrir al crimen y a la brutalidad con el fin de enriquecerse, con el consentimiento de una nación que se lucraba deliberadamente de la conducta criminal y para usurpar una gran porción de territorio extranjero.

·       Este libro muestra que en 1907 el gobierno peruano sabía que la Casa Arana ejercía dominio comercial sobre la zona cauchera situada entre los ríos Igaraparaná y Caraparaná. Los peruanos, en su gran deseo por adquirir soberanía sobre esa región, no sólo toleraban las matanzas de indios, sino que con el apoyo del sus fuerzas militares, despojaban de las propiedades a los colombianos.